Descubro, en una de estas visitas esporádicas a la televisión, a veces tan necesarias, que hay algo que se ha incrementado: los programas de reporteros.
Supongo que el pistoletazo de salida lo dio el programa "Callejeros" y desde entonces aparecieron versiones, una, prácticamente, por canal sintonizado. Hay un tema predominante en este tipo de formatos: el de acudir con cámara en mano a una barriada, a un poblado chabolista o a la periferia. El propósito es mostrar el tipo de gente que existe, y que vive, en determinadas condiciones, generalmente infrahumanas (entendiendo infrahumano desde el capitalismo y la sociedad de consumo) y que a la gente que está en su casa le tiene que remover nerviosamente en el asiento. El objetivo seguro que lo consiguen, no es difícil crear un cierto cargo de conciencia a todo el que es espectador, que sabe que eso existe, pero que actúa como como si no existiera. También supongo que a veces no quieren denunciar nada, simplemente muestran, pero dejan a los telespectadores con una mezcla de culpabilidad y de consuelo, y, lo peor, de sentirse alejados de lo que ven, más ajenos todavía.
Ahora bien,¿ por qué no van a las casas de los pudientes, de los todopoderosos, a que les enseñen dónde ponen el culo cuando se les mueve los intestinos?, claro, da más morbo filmar al cabeza de familia de la chabola enseñando en el agujero donde lo hace...
Supongo que el pistoletazo de salida lo dio el programa "Callejeros" y desde entonces aparecieron versiones, una, prácticamente, por canal sintonizado. Hay un tema predominante en este tipo de formatos: el de acudir con cámara en mano a una barriada, a un poblado chabolista o a la periferia. El propósito es mostrar el tipo de gente que existe, y que vive, en determinadas condiciones, generalmente infrahumanas (entendiendo infrahumano desde el capitalismo y la sociedad de consumo) y que a la gente que está en su casa le tiene que remover nerviosamente en el asiento. El objetivo seguro que lo consiguen, no es difícil crear un cierto cargo de conciencia a todo el que es espectador, que sabe que eso existe, pero que actúa como como si no existiera. También supongo que a veces no quieren denunciar nada, simplemente muestran, pero dejan a los telespectadores con una mezcla de culpabilidad y de consuelo, y, lo peor, de sentirse alejados de lo que ven, más ajenos todavía.
Ahora bien,¿ por qué no van a las casas de los pudientes, de los todopoderosos, a que les enseñen dónde ponen el culo cuando se les mueve los intestinos?, claro, da más morbo filmar al cabeza de familia de la chabola enseñando en el agujero donde lo hace...