10.8.09

Génesis...Éxodo

Llegué contigo y me fui sin ti, pero sin embargo me ayudaste a bajar los muebles. Regreso al útero materno del que no recuerdo nada, espacios de una casa en la que retorné a los 20 años y en la que visité con frecuencia a esa persona que me hizo comprender lo complicado de los sentimientos y que en las relaciones siempre uno gana, mientras el otro ha de convencerse de que también obtiene un beneficio producto del abandono. Qué estupidez, piensas 10 años después...La vida no es que dé vueltas, es que a veces me marea para volver a posarme sobre el eje sobre el que mis pies giran, para después obligarme a detenerme y experimentar toda esa sensación desagradable de la perilinfa en mis oídos, hasta que todos mis fluídos se paralizan y la visión deja de ser una lluvia sobre mis ojos que empaña la realidad. Qué más da cuando los libros en las cajas pesan más que tú y yo juntos...